Tomado de su Facebook
- Mami, qué es un golpe de estado?
Mi mamá abrió los ojos como par de huevos fritos y dijo con la voz más grave que le había escuchado hasta entonces:
- ¿Por qué me preguntas eso?
En ese momento confirmé lo que sospechaba, lo que estaba ocurriendo era importante.
- Porque eso dicen en la tele
Se levantó rápidamente y, sin dar respuesta a mi duda, fue hasta la sala a ver qué ocurría.
Había despertado temprano a estudiar y me aburrió lo que leía, por eso prendí la tele y vi las imágenes que hoy se me aparecen desordenadas: un tanque, unos soldados, armas, gente corriendo y la frase Golpe de Estado.
Yo seguí en lo mío hasta que mi mamá volvió a reparar en mí cuando me despedí.
- ¿Y tú a dónde vas? Me preguntó.
- Al colegio, tengo examen.
En ese momento fue que me explicó lo que sucedía. Recordé cómo lloró de rabia y dolor cuando el caracazo, así que pensé, bueno, si le hacen un golpe a Carlos Andrés, son buenos. Entendía lo que mi experiencia de diez años recién cumplidos podía ofrecerme, por eso, a mis 16 y llegado el momento de las elecciones le pedí a mi mamá que votara por él. Ella no estaba convencida, era un militar y los militares, bueno, Argentina, Chile, bueno, mucho sufrimiento, no sé, la derecha, la izquierda, quién sabe si...
Salió casi a última hora a votar. Cuando regresó le pregunté: ¿por quién votaste?
- Por Chávez, respondió con una seriedad que ahora me recuerda al día de las elecciones posguarimberas, cuando le dije que no le darían las piernas para caminar hasta el centro electoral: “hoy voy a votar así sea lo último que haga en esta vida".
Así de resueltas y firmes, chavistas desde ese entonces y para siempre.
- Porque eso dicen en la tele
Se levantó rápidamente y, sin dar respuesta a mi duda, fue hasta la sala a ver qué ocurría.
Había despertado temprano a estudiar y me aburrió lo que leía, por eso prendí la tele y vi las imágenes que hoy se me aparecen desordenadas: un tanque, unos soldados, armas, gente corriendo y la frase Golpe de Estado.
Yo seguí en lo mío hasta que mi mamá volvió a reparar en mí cuando me despedí.
- ¿Y tú a dónde vas? Me preguntó.
- Al colegio, tengo examen.
En ese momento fue que me explicó lo que sucedía. Recordé cómo lloró de rabia y dolor cuando el caracazo, así que pensé, bueno, si le hacen un golpe a Carlos Andrés, son buenos. Entendía lo que mi experiencia de diez años recién cumplidos podía ofrecerme, por eso, a mis 16 y llegado el momento de las elecciones le pedí a mi mamá que votara por él. Ella no estaba convencida, era un militar y los militares, bueno, Argentina, Chile, bueno, mucho sufrimiento, no sé, la derecha, la izquierda, quién sabe si...
Salió casi a última hora a votar. Cuando regresó le pregunté: ¿por quién votaste?
- Por Chávez, respondió con una seriedad que ahora me recuerda al día de las elecciones posguarimberas, cuando le dije que no le darían las piernas para caminar hasta el centro electoral: “hoy voy a votar así sea lo último que haga en esta vida".
Así de resueltas y firmes, chavistas desde ese entonces y para siempre.
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