Israel es un golem geopolítico





José Javier León

Texto leído el 15 de agosto de 2014 en un acto

en solidaridad por Palestina














Un hijo del decadente imperio inglés heredado por el naciente imperio norteamericano que emergió de los crímenes de la llamada II Guerra Mundial


Es un hijo del capitalismo, y cuando éste desaparezca, desaparecerá.


Sólo Palestina existe. Sus olivares y cabras están más vivas que las trasnacionales que utilizan la base militar sionista para marcar sus productos. 


Israel es una escuela del horror. Quien desee asomarse a los frutos del capitalismo, racismo, discriminación y muerte, hágalo en Israel.


Es una cuña del capitalismo anglosajón en Oriente Medio y fundamental promotor histórico del odio contra los árabes

Es un enclave nuclear y un polígono de tiro con blancos reales.


Una armería donde se prueba la última generación de destrucción masiva


Es un fruto de Hollywood. Si quiere una ficción de democracia erguida sobre un charco de sangre reciente, aquí la tiene.


Quien crea que el llamado Estado Israelí tiene algo que ver con la religión judía o que los judíos que hoy masacran al pueblo de Palestina son sobrevivientes del holocausto, ¡o que son judios!, está intoxicado de propaganda sionista.


El Terrorismo es una herramienta de exterminio creada por el Capitalismo y la ha puesto en uso siempre que la ha necesitado y con cualquier bandera y bajo el auspicioso disfraz de la religión que convenga, católica, judía, musulmana. 


Detrás de la destrucción de Irak, Afganistán, Libia. Detrás de los ataques a Siria. Está el sionismo con base en Israel. No es un ataque de religiones ni culturas. Es la lectura simple y cruda de la imperiosa necesidad del capital de obtener energía y agua. 


Nada tiene que ver en esto dios o los dioses que sean. 


Todas las muertes tienen un solo signo: control militar de los territorios para la obtención de hidrocarburos y gas. ¿Cómo se obtendrá el control? ¿Quiénes serán los ejércitos? Mercenarios o ejércitos regulares, contratistas o ejércitos privados, no importa. Lo esencial es el control. 


De ahí que el enemigo del capitalismo en la región no sea el socialismo o el comunismo sino la dignidad de los pueblos que defienden sus territorios y sus recursos. 



Sólo Palestina existe. Como sólo existen Irán, Irak, Libia, Siria o Afganistán. El imperio del dólar sucumbirá y su caída arrastrará a los bancos sionistas. Hoy están jugando sus últimas cartas y no creo que no estén dispuestos a chantajear al mundo con la guerra nuclear definitiva. 


El odio del capital por todo lo humano puede llevar a sus hijos –los sionistas- a ensayar la Gran Solución.



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